Los tanques de nitrógeno son tanques de almacenamiento cilíndricos que se usan para almacenar y suministrar nitrógeno. Estos tanques se fabrican con diferentes materiales como el acero, el aluminio, el cobre y el plástico, aunque el acero inoxidable es el más común. Se utilizan en una amplia variedad de procesos industriales, como procesos de hibernación, procesos de soldadura, procesos químicos y para el transporte de nitrógeno.
Además, se usan ampliamente en el sector de consumo para el criogenizado y el enfriamiento rápido o prolongado de alimentos. Instalar un tanque de nitrógeno no es una tarea fácil. Hay que tener en cuenta una serie de medidas de seguridad, para prevenir posibles accidentes por el mal almacenamiento de esta sustancia. Aquí hay algunos consejos para garantizar una instalación correcta.
¿Cuáles son los pasos para la instalación segura del nitrógeno?
En el primer paso hay que ubicar un lugar adecuado para instalar el tanque de nitrógeno. El lugar debe ser lo suficientemente resistente para soportar el peso del tanque y lo suficientemente amplio para los accesorios y utensilios con los que se va a operar. El espacio sugerido para su tanque de nitrógeno es generalmente de al menos 2 m por lado. El segundo paso es acceder a la ubicación prevista para la instalación del tanque de nitrógeno. Hay que cavar un hoyo para el montaje del tanque, utilizando herramientas de excavación para hacer una zanja de seguridad de al menos 90 centímetros de profundidad y un ancho ligeramente superior al diámetro del tanque.
El tercer paso consiste en colocar el tanque en la zanja. Debe colocarse de forma segura sobre una base sólida como una losa de hormigón. Los extremos inferiores del tanque se deben calzar con grava gruesa para evitar un balanceo. En el paso 4, una vez que el tanque está colocado, se debe montar una toma de aire para permitir la circulación de nitrógeno desde y hacia el tanque, seleccionando un aparato de toma de aire de calibre adecuado para asegurarse de que los gases fluyan de forma segura hacia el tanque.
En el paso 5, para mantener la presión, el tanque debe equiparse con válvulas adecuadas, tales como válvulas de alivio, válvulas de soplado y válvulas de servicio, para permitir que el gas salga o entre del tanque de forma segura. En el paso 6, se unen los componentes a un caudalímetro. El caudalímetro mide el caudal de nitrógeno para permitir una regulación precisa y evitar la formación de vacío. Por último, para una operación segura, el tanque debe ser instalado con un sistema de protección contra incendios, como una válvula de incendio, un detector de humo o un sistema de aspiración con extintor de incendios.
¿Cómo se hace un mantenimiento adecuado de los tanques de nitrógeno?
Una vez que el tanque de nitrógeno ha sido instalado correctamente, es fundamental llevar a cabo un mantenimiento adecuado para garantizar su seguridad y estabilidad en el largo plazo. En primer lugar, hay que realizar una inspección regular de los componentes y de la estructura del tanque. Esto debería realizarse al menos una vez al año para detectar cualquier signo de desgaste o daño. En segundo lugar, es recomendable revisar periódicamente el caudal, presión y temperatura para asegurarse de que el equipo esté funcionando correctamente y sin problemas. Estas mediciones regulares pueden ayudar a prevenir las fugas y problemas mecánicos.
En tercer lugar, es necesario llevar a cabo un mantenimiento adecuado de los componentes con los que se opera el tanque, reemplazando los componentes desgastados para mejorar la seguridad y evitar defectos técnicos. En cuarto lugar, se sugiere limpiar y desengrasar el tanque periódicamente para eliminar los residuos. Esto ayudará a mejorar la durabilidad del tanque y a prevenir las fugas y los daños.
En el quinto paso, se recomienda utilizar un limpiador para eliminar la suciedad y la humedad del tanque. Esto puede ayudar a prevenir fugas y daños al nitrógeno. Por último, el tanque debe recibir una última inspección antes del uso. Esto ayudará a asegurar que el tanque esté en buen estado para su uso. Mantener un tanque de nitrógeno en un buen estado operativo es fundamental para garantizar la seguridad de los trabajadores y la calidad de los productos.
Las sugerencias de Kalstein para los tanques de nitrógeno
Kalstein, entiende que instalar y mantener un tanque de nitrógeno requiere una gran cantidad de trabajo y de vigilancia, pero sigue siendo una tarea relativamente fácil si se realiza correctamente. Kalstein provee tanques elaborados en acero y con mecanismos integrales de seguridad para su uso en óptimas condiciones. Si está interesado en la compra, la empresa tiene a disposición varios modelos para la venta, a precios realmente competitivos en las páginas web AQUI y AQUI.