El agua es una de las riquezas más preciosas y vitales para la humanidad, al punto que es primordial para la vida. Pero, a pesar de esto, también puede contener y transportar microorganismos y bacterias que potencialmente pueden causar serios problemas de salud (incluidas altas tasas de mortalidad en el mundo en desarrollo). Afortunadamente, hoy en día existen soluciones para limpiar el agua de impurezas, como los purificadores de agua.
El proceso de purificación del agua se basa en la eliminación y reducción de contaminantes, como sustancias químicas, minerales, sólidos y bacterias, que pueden estar contenidos en el agua.
Es por eso que algunos purificadores de agua pueden eliminar incluso gases inodoros e insípidos, como el arsénico, del agua.