La fototerapia es la técnica de referencia empleada como tratamiento contra la hiperbilirrubinemia neonatal cuadro clínico en el recién nacido que si no es tratado a tiempo puede conllevar al desarrollo de afecciones irreversibles del sistema nervioso como el Kernícterus, esta técnica se basa en el uso de las radiaciones electromagnéticas (luz) para reducir los niveles de bilirrubina en sangre, empleando para ello las propiedades de la luz.
Cuando las radiaciones luminosas inciden en la piel y capilares sanguíneos dan lugar a la transformación de la bilirrubina en fotoisómeros de bilirrubina hidrosolubles que luego se excretan de manera más fácil por las heces y la orina, sin necesidad de conjugarse en el hígado, produciendo así un descenso de la bilirrubina en sangre.